ANASAP apoya la labor pública en defensa de la salud mental de los niños del divorcio de España del Magistrado del Juzgado de Familia D. Francisco Serrano Castro

Suscribimos íntegramente sus palabras: el Síndrome de Alienación Parental (SAP) existe, no es sexista, y es «una de las formas más severas de interferencia parental que se produce en el contexto de las disoluciones matrimoniales y rupturas de convivencia de pareja con hijos menores«.

El magistrado D. Francisco Serrano, es presidente de la Asociación Multidisciplinar para la Investigación de Interferencias Parentales (ASEMIP) http://www.asemip.org/ASEMIP_Junta_Directiva_080208.pdf

El juez Francisco Serrano, presidente de la Asociación Multidisciplinar para la Investigación de Interferencias Parentales (ASEMIP) ha lamentado que el Ministerio de Igualdad avale un libro que niega la existencia del Síndrome de Alienación Parental (SAP).

En un comunicado remitido a Efe, el juez de Familia de Sevilla insiste en que el Síndrome de Alienación Parental (SAP) existe y es «una de las formas más severas de interferencia parental que se produce en el contexto de las disoluciones matrimoniales y rupturas de convivencia de pareja con hijos menores».

Por ello, lamenta que el Ministerio de Igualdad haya auspiciado hoy la presentación en su sede de Madrid del libro «El pretendido Síndrome de Alienación Parental», que según sus autoras «perpetúa el maltrato y la violencia» y es utilizado en casos de divorcio «solo por el afán de ganar».

Por el contrario, la ASEMIP recuerda que el propio Consejo General de Colegios de Psicólogos aconsejó en 2008 profundizar en el estudio y conocimiento del síndrome y en el mismo sentido se expresó en diciembre pasado el Congreso sobre Interferencias Parentales celebrado en Santiago de Compostela.

«Las interferencias parentales, es decir, la obstaculización de la relaciones de los hijos con alguno de sus dos progenitores sin que exista causa que lo justifique es el principal problema derivado de las rupturas de pareja», según las conclusiones de dicho congreso.

Serrano recuerda que también la Memoria de la Fiscalía General del Estado correspondiente a 2009 denunció la «gravedad y elevada frecuencia» con la que las Fiscalías de Menores se encuentran con esas situaciones en las que «uno de los padres (normalmente el custodio) se sirve, voluntaria o inconscientemente, de su mayor proximidad con el menor para perjudicar el vínculo con el otro progenitor».

Por ello, su calidad de presidente de la ASEMIP, Serrano lamenta que el Ministerio de Igualdad «persista en su actitud de negar realidades y evidencias, partiendo de posicionamientos sectarios y alienadores».

Además, dice que Igualdad «desprecia el debate», como lo demuestra que no haya respondido al ofrecimiento de la ASEMIP de participar en un grupo de trabajo para discutir sobre el síndrome y alcanzar «conclusiones objetivas y fiables».

Por ello, el juez expresa su «repulsa» hacia la actitud de dicho Ministerio, que «parece sólo empeñado en introducir sesgos ideológicos y de falsa confrontación entre géneros en el avance del conocimiento científico de los fenómenos sociales».

Ello, en última instancia, «conduce a la ocultación de graves problemas actuales en el ámbito de la aplicación del derecho de familia y a la justificación de la ausencia de recursos y medidas para que sus principales víctimas, los hijos menores, puedan recibir la atención que precisan», según el comunicado.

«En conclusión, entendemos que resulta paradójico que se niegue la manipulación de los niños por sus padres o madres, cuando se miente y manipula a la propia opinión pública», sostiene ASEMIP.